
La intervención temprana aprovecha el hecho de que la mandíbula de un niño está creciendo todavía. El tratamiento temprano, también puede ser útil cuando los arcos dentales y maxilares no se encuentran en la posición correcta. Aparatos funcionales pueden corregir o mejorar estos problemas. Normalmente se necesita más tratamiento posteriormente, pero puede ser más corto y menos complicado.
Los frenillos dentales para niños han mejorado mucho en el último par de décadas. La tecnología los ha hecho más cómodos y más atractivos que los aparatos que la mayoría de padres recuerdan haber utilizado También son más asequibles, lo que significa que muchos más niños tienen acceso a estos.